Antes de la reina Isabel II: el trágico pasado del príncipe Felipe

Es difícil imaginarse al Príncipe Felipe no estando a lado de la Reina Isabel II y es que la pareja real tiene más de siete décadas juntos. Sin embargo, el Duque de Edimburgo, quien está por cumplir 100 años este año, vivió una serie de tragedias durante su infancia y adolescencia. Aquí te contamos su trágica vida antes de conocer a la Reina Isabel.

Felipe nació en 1921 en Corfú, Grecia. Fue el quinto y único hijo varón del Príncipe Andrés de Grecia y la Princesa Alice de Battenberg. Sin embargo, Felipe llegó al mundo en un momento convulso para su país natal y su familia. Cuando tenía sólo un año de edad, el ejército Griego, liderado por su padre, invadió Turquía; en muy poco tiempo fue derrotado y destituido de su cargo en el ejército. 

La derrota fue tal que incluso la familia real Griega, culpada de la derrota, fue derrocada y muchos de ellos ejecutados. La familia de Felipe pudo huir gracias a la ayuda del Rey Jorge V del Reino Unido. Escondido en una caja de fruta en un barco, Felipe y su familia se exiliaron en París. A pesar de que sus primeros años de vida vivió una vida nómada, estos años fueron los más felices y estables para la familia y sobre todo para el joven príncipe.

Su difícil pero idílica vida se vio amenazada cuando su madre, la Princesa Alice, comenzó a tener problemas psicológicos en los cuáles decía tener visiones religiosas. Su familia decidió internar a Alice en un sanatorio en Suiza donde conocería verdaderos horrores. Felipe no volvería a ver su madre hasta muchos años después. Mientras tanto, su padre, el Príncipe Andrés, se fue alejando de sus hijos al grado de abandonarlos para irse a Montecarlo a darse una vida de lujos junto a su amante.

Al inicio de la década de los treinta, Felipe se encontraba prácticamente huérfano y sus hermanas se tuvieron que hacer cargo de él. Durante estos años formativos, sus hermanas, quienes eran mayores y ya estaban haciendo una vida propia, decidieron que lo mejor para su pequeño hermano era que fuera criado en Inglaterra por su tío, el Príncipe George Mountbatten, hermano de Alice. A pesar de que se la pasaba constantemente viajando entre Alemania y el Reino Unido, junto a su tío vivió unos años relativamente feliz.

En 1933, su hermana Teodora, quien ya estaba casada en Alemania, decidió que Felipe debía mudarse al país germano a estudiar en Salem, una escuela de Élite con la que su familia tenía conexiones. Con 12 años de edad, Felipe llegó a Alemania justo cuando el partido Nacional Socialista estaba alcanzando su apogeo. De hecho, sus cuatro hermanas y sus esposos se afiliaron al partido en esa época. Sin embargo, a sólo un año de su llegada a Salem y con la amenaza inminente de la guerra, Felipe regresó a Inglaterra.

No pasaría mucho tiempo antes de que la institución se convirtiera en sede de las juventudes Hitlerianas y su fundador tuviera que exiliarse en el Reino Unido. Kurt Hahn, de origen judío, fundó la Gordonstoun School en Escocia a la que Felipe ingresaría y donde adquiriría muchos de los intereses que mantuvo toda su vida. Sin embargo, esa estabilidad no duraría por mucho, en 1937, la trágica muerte de su hermana Cecile y sus hijos en un accidente aéreo lo marcaría de por vida. 

Además, un año después sufriría la pérdida de su tío George a causa de cáncer de hueso por lo que en medio de la tristeza quedaría a cargo de otro hermano de su madre, Lord Louis Mountbatten quien se convertiría en su mentor y quien lo impulsaría en su carrera como oficial de la marina del Reino Unido. Con 18 años de edad Felipe ingresó a la escuela naval de Dartmouth en donde sólo unos meses después conoció a la joven Princesa de 12 años, Isabel. Desde entonces, ambos comenzaron una relación de amistad mediante cartas pero la guerra pondría distancia entre ambos.

En 1940, Felipe es enviado al Mediterráneo en donde su división debía destruir una flota Italiana; Felipe destacó en la misión y fue condecorado con la Cruz de Guerra Griega. Cuando tenía sólo 21 años de edad, Felipe era ya considerado un héroe de guerra y fue ascendido a Primer Teniente. Sus logros personales a pesar de la terrible soledad en la que siempre había vivido, finalmente le comenzaron a llenar profundamente. Así mientras su carrera naval iba creciendo también lo hacía su relación con la heredera al trono.

Con mucha resistencia por parte de la familia real quienes veían a Felipe como un solitario sin una familia y un tormentoso pasado, finalmente Felipe decide que quiere pasar el resto de su vida junto a Isabel. En una muestra de lealtad y compromiso, Felipe renuncia a su nacionalidad y a su derecho al trono de Grecia y obtiene la nacionalidad británica tomando el nombre de Felipe Mountbatten. En 1947, con la bendición del entonces Rey y padre de Isabel, Jorge VI, Felipe e Isabel hacen público su compromiso. Y el resto, como se dice, es historia.