Hija de la actriz Debbie Reynolds y del cantante Eddie Fisher. Su padre era judío, hijo de inmigrantes de Rusia, y su madre fue criada como cristiana, y desciende de escoceses, irlandeses e ingleses. Su hermano menor es el productor y actor Todd Fisher, y sus hermanastras son las actrices Joely Fisher y Tricia Leigh Fisher, cuya madre es la cantante y actriz Connie Stevens. Cuando Fisher tenía dos años, sus padres se divorciaron después de que su padre dejara a Reynolds por su mejor amiga, la actriz Elizabeth Taylor, viuda del mejor amigo de su padre, Mike Todd. Al año siguiente, su progenitora se casó con el propietario de una cadena de tiendas de zapatos Harry Karl.
En el año 1977 alcanza la fama por su papel de “princesa Leia” de La guerra de las galaxias. Papel que vuelve a interpretar en las continuaciones El Imperio contraataca (1980) y El retorno del Jedi (1983). Además trabajó en películas como The Blues Brothers, Hannah y sus hermanas, The 'Burbs, y When Harry Met Sally. El 29 de abril de 2014, fue presentado el reparto de Star Wars Episodio VII y Fisher volvía a trabajar nuevamente en la saga. El filme, subtitulado El despertar de la Fuerza, se estrenó mundialmente el 18 de diciembre de 2015. Fue nominada en 2016 al Saturn Award para la mejor actriz secundaria por su interpretación.
También es conocida por su exitosa novela Postcards from the Edge y el guion de la película del mismo nombre, así como por el libro Wishful Drinking. Fisher sufrió problemas relacionados con las drogas y el alcohol. Ha publicado dos novelas de éxito, de marcado carácter autobiográfico.
Estuvo casada con el cantante Paul Simon desde agosto 1983 hasta julio 1984. Durante su matrimonio apareció en el vídeo musical de Simon para la canción "Rene and Georgette Magritte with Their Dog after the War". El tema de Simon "Hearts and Bones" es acerca de su relación. Posteriormente, tuvo una relación con Bryan Lourd, director de Creative Artists Agency. Tuvieron una hija Billie Catherine Lourd (nacida el 17 de julio 1992). La pareja se rompió y después tuvo una estrecha relación con James Blunt.
Carrie Fisher falleció el 27 de diciembre de 2016. Se encontraba hospitalizada desde el día 23 del mismo mes en que sufrió un ataque al corazón poco antes del aterrizaje de un vuelo en el aeropuerto de Los Ángeles. La actriz recibió reanimación cardiopulmonar en la aeronave y fue trasladada al hospital UCLA Medical Center de Los Ángeles.