Una mujer que le puso el son al caribe, que agitó cuerpos entre rumba, guaracha y guaguancó. Una reina que sedujo con su voz y ritmo a todo el mundo. Una reina que con al grito de azúcar endulzó nuestros oídos. Ahora toca el turno de rendir tributo y recordar su gran legado de la Reina de la salsa, Celia Cruz, porque "la vida es un carnaval".
Celia Cruz y su gran legado
Durante poco más de medio siglo, Celia nos ha hecho participes de una gran fiesta y a pesar de su ausencia física, su música la mantiene viva.
Se bautizaron asteroides en su nombre, también algunas calles; se le reconoció incansablemente: se le indujo al Salón de la Fama de la Música Internacional. Los homenajes hacia su vida y obra nunca terminarán, porque lo que hizo esta Reina, fue darnos lo más dulce de la vida: su música.